Vivir en el centro del pueblo está lleno de ventajas. Tienes todo lo que necesitas al alcance de tu mano, no tienes que depender de transportes para desplazarte, ahorrándote así grandes atascos y problemas de aparcamiento, y volver de noche a casa no supone un gran peligro. Sin embargo, no hay ventaja capaz de igualar la tranquilidad que te reporta vivir alejado del ruido, cerca pero a la vez lejos de los grandes edificios y de los bulliciosos comercios. Aquí no hay dilemas con las comunidades de vecinos ni nos molestan las obras que plagan las calles. Aquí como mucho nos incordiará algún que otro animal o el solo hecho de tener que madrugar para abandonar la paz del campo y adentrarnos en la vida urbana.
Solución/ebazpena: "Trabajando bajo el sol": playa de Bournemouth (Inglaterra) [14/07/2011]
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