Para ver por doquier a la protagonista de la entrada de hoy no nos hace falta recurrir a las cervezas de las entradas anteriores. Basta con salir al monte, caminar cerca de un grupo de pinos y alzar la vista. En esta época del año es fácil encontrar pinares plagados de estos pequeños (o no tan pequeños) invasores que se instalan en ellos para alimentarse y seguir su desarrollo.
La popularmente conocida como "procesionaria" es un pequeño insecto que establece sus característicos nidos en la copa de ciertos árboles debilitándolos poco a poco y provocando reacciones en los humanos que rara vez son buenas.
Su curioso nombre le viene dado debido a que cuando crecen y abandonan su blanco hogar caminan por el suelo como si estuvieran en una procesión buscando un lugar para ocultarse y convertirse en crisálida.
En su lento y ordenado caminar van dejando un rastro que puede llegar a provocar irritación y alergias a quién se encuentre cerca. Por eso, si las veis por ahí, no os acerquéis demasiado y dejad que sigan su silencioso camino.
Solución/ebazpena: "No me cuentes cuentos": Entrada del salón del comic de A Coruña (Galicia) [17/08/2009]
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