Esculturas, estatuas, bustos y retratos nos ayudan a recordar y homenajear a personajes cuya vida u obras han sido importantes en la historia. Sin embargo, no todas las estatuas que encontramos por la calle son de hierro, ni de de bronce, ni de piedra.
Las hay de carne y hueso que a pesar de las inclemencias del tiempo salen día tras día a recorrer pueblos y ciudades en busca de un rincón para instalarse y poder ganar unos euros que les ayuden a seguir adelante. Los que se esconden tras el maquillaje no son ni serán reyes, caballeros, poetas o famosos pintores y su historia, que lamentablemente rara vez tiene final feliz, nunca es recordada.
Solución/ebapena: "Enseñando los dientes": Gobantes de Losa (Burgos) [4/09/2010]
San Juan de Luz (Francia)
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