2011-09-22

¡Qué miniatura!

Grandes ejércitos, coches, animales, trenes, máquinas, mobiliario de casas antiguas, muñequitas... Estos son solo algunos ejemplos de las muchas clases de miniaturas que podemos encontrar. Podemos adquirirlas y pintarlas pacientemente a nuestro gusto, usarlas para jugar a juegos de rol o simplemente coleccionarlas por pura afición y disfrutar de ellas cuando tengamos tiempo libre. Sin embargo, no todas las miniaturas existentes son accesibles para todos. Algunas ni siquiera están a la venta puesto que tienen un valor incalculable.
Es el caso del libro más pequeño del mundo que vemos en esta fotografía. Para poder contemplar y disfrutar de este ejemplar hay que desplazarse hasta el lugar en el que se conserva bajo las mejores condiciones posibles. Eso sí, que nadie intente leer lo que está escrito, ¡perderá varias dioptrías en el intento!

Solución/ebazpena: "Allá donde fueres, haz lo que vieres": Gervis Place, Bournemouth (England) [11/07/2011]

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