Dicen que el paso del tiempo todo lo cura, que el transcurrir de los días nos aleja de las malas experiencias pasadas y poco a poco recobramos nuestro ser. Y puede que sea así, al menos en cuestiones físicas. Las heridas acaban sanando, los edificios derruidos en un terremoto vuelven a reconstruirse, las costas manchadas de petróleo tras un vertido vuelven a su origen... Sin embargo, los malos recuerdos siguen aferrándose a las mentes de los que sufren al igual que en esta foto, los últimos restos de la gran catástrofe ecológica de 2002 siguen tiñendo las rocas de negro.
Solución/ebazpena: "¡¡Pleno!!" Bolera en Poole (Inglaterra) [11/07/2011]
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